Lo descubrí hace un par de años en Real 210 Gastrobar (de Mauro Barreiro que en breve reabrirá como La Curiosidad). Me enganchó, y eso que no soy muy fanática de la ginebra.
Múltiples variedades, y además, se hacen en Barbate...
¿Qué qué es? Pequeñas bolsitas con preparados aromáticos de diferentes hierbas que, mezcladas, infusionan con el propio alcohol de la ginebra aportando un exquisito olor, un atractivo colorcito a la copa (si se prepara en copa de balón, mejor) y un sutil sabor que puede ir desde lo más exótico (toques árabes), hasta un ligero gusto a frutas. ¿Que si es afrodisíaco? Bueno, para mí los mojitos lo son más, y aumenta su efecto en Conil (ya hablaré de eso más adelante), pero una gintonic con su infu, tiene su puntito.
Lo más de lo más es degustarlo en el Bakara, en el paseo marítimo de Barbate.
Iré en cuanto pueda, y hablaré con sus creadores. Lo prometo.
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